jueves, 12 de mayo de 2011

LA UGT REFLEXIONA SOBRE LA PROFESIÓN EN EL DÍA MUNDIAL DE LA ENFERMERÍA
“¡INDIGNAOS!” “ Allá donde voy a hablar proclamo que las enfermeras deben defender un sistema sanitario disponible para todos y financiado con impuestos, y que al menos en los países en donde las enfermeras dominan numéricamente, deberían ser los principales proveedores de la atención básica de salud”. Reclamo una función exclusiva para las enfermeras, pues son las únicas proveedoras de cuidados de salud que permanecen con los enfermos, con los incapacitados y desvalidos, las 24 horas del día y siete días a la semana.”

Con estas palabras hablaba la Dra. Virginia Henderson a las enfermeras que visitaba. Hoy quiero recordarlas en este día mundial de la enfermería, por su trascendencia y actualidad.
Hoy más que nunca, en una sociedad tentada por un capitalismo desenfrenado que nos aboca a depender cada día más de los sistemas financieros, conviene recordar la necesidad de las personas de implicarse, de luchar por su salud. Son de todos conocidas las maniobras por romper nuestro sistema público de atención, un sistema eficiente y efectivo, universal y cercano, pero también un sistema marcado por el volumen de negocio que representa y en ello se han fijado las aseguradoras y los bancos que pretenden con el consentimiento social ofrecer un servicio a la medida de quienes lo puedan pagar.

Las enfermeras estamos comprometidas profesionalmente con la ayuda a quienes tienen problemas de salud, entendiendo estos bajo un prisma holístico. Son muchos los autores que nos advierten que curar las enfermedades solamente produce sensación de bienestar transitoria, pero que la salud va más allá de esa curación, implicando a todos los órdenes sociales, desde el gobierno hasta los ciudadanos, siendo estos quienes deciden con su voluntad el estado de salud general.

Las enfermeras hemos aprendido a pensar críticamente para así determinar en nuestros diagnósticos las respuestas humanas no satisfechas. Hemos fundamentado nuestras decisiones sobre la salud de los ciudadanos en factores culturales, sociales, psicológicos y también físicos. Hemos defendido el mantenimiento de una vida productiva y sana, en donde las personas decidan libremente sobre su salud.

Hoy es el momento de crecer un poco más reivindicando el empoderamiento social que permita a los ciudadanos marcar sus expectativas de salud. Nos toca recordar a la ciudadanía que la salud no se consigue por decreto, sino con la participación de todos, con estructuras y políticas participativas, con la revitalización de los consejos de salud a nivel local, comarcal, provincial o de Comunidad. Que la salud es de todos y que todos estamos implicados en su promoción.
Las enfermeras somos agentes sociales implicados en mejorar la salud, por ello hoy, día mundial de la enfermería debemos evidenciar los problemas que afectan la salud de la población, no solamente los problemas físicos sino los sociales que atañen a nuestro entorno.

En este día no vamos a reivindicar puestos de trabajo, ni más sueldo, ni mejores condiciones laborales para atender a las personas, ni ratios mayores que permitan mejores cuidados, ni más responsabilidad en nuestras funciones, ni tantas cosas más que como enfermeras nos merecemos. Solamente te solicitamos como promotores de la salud, que ante todas estas alteraciones sociales, ¡REACCIONA!, no permanezcamos indiferentes, alcemos la voz del pueblo hasta las urnas y desde allí al parlamento, y parafraseando a Stéphane Hessel, ¡INDIGNAOS! Ciudadanos